Durante el 2020 y a través de la Alianza Mundial por el Suelo (AMS), la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) aprobó el protocolo elaborado por la consultora argentina Carbon Group-Agroclimatic Solutions. Este protocolo tiene como objetivo promover el secuestro de carbono en los suelos productivos bajo el programa RECSOIL, una iniciativa que busca aplicar las mejores herramientas y tecnologías disponibles con el lema “Recarbonización de los suelos mundiales”.
El protocolo para RECSOIL fue desarrollado por la consultora argentina Carbon Group con el apoyo de un equipo de expertos en ciencias de los suelos, clima, agroindustria, finanzas y leyes internacionales, agronomía, gestión ambiental y cambio climático.
El sistema fue aprobado con el apoyo de todos los países y socios que integran la Alianza Mundial por el Suelo (AMS) de la FAO. En este sentido, se presenta como una certificación necesaria ante instituciones financieras globales para conseguir financiamiento en pos de una producción más sostenible, que garantice la seguridad alimentaria mundial, aun ante eventos disruptivos.
Su diseño se basa en el conocimiento más avanzado en ciencias del suelo, cadenas de valor de agronegocios, financiamiento climático, desarrollo económico, cambio climático y mercados financieros y de carbono. “Este es uno de los pasos más importantes para que la humanidad pueda eludir la catástrofe climática que vienen pronosticando científicos de todo el mundo”, asegura la Dra. Carmen Virasoro, directora de Carbon Group.
Por su parte, el Ing. Agr. Dr. Guillermo Peralta de Carbon Group también expone sus ventajas: “Contar con un protocolo que se pueda adaptar a las realidades de los productores y sus cultivos en cada ambiente del mundo era algo indispensable para comenzar este proceso de mejora de los suelos que implica la descarbonización de la atmósfera y el incremento del carbono en los suelos”.
Suelos recarbonizados
Los suelos recarbonizados pueden ser una solución frente a los retos del clima, ya que es esencial contar con suelos sanos para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y aumentar la resiliencia frente al cambio climático manteniendo o aumentando su contenido de carbono. En este sentido, el Dr. John Cole (Carbon Group) explica que “a partir de esta aprobación —realizada por el principal ente mundial para el cuidado y mejora de los suelos— se iniciará el camino que permitirá a los sectores productivos ser más resilientes frente al cambio climático al tiempo que realizan una gran contribución ambiental”.
Miguel Taboada, director del Instituto de Suelos del INTA y presentador del documento final ante la Asamblea de la Alianza Mundial por el Suelo, afirma que “el protocolo reúne el conocimiento de los principales científicos de suelos, agricultura y cambio climático del mundo. Con esta aprobación se inicia una nueva etapa con la que soñamos quienes dedicamos toda la vida al estudio y conocimiento de los suelos”.
Por último, Martín Fraguío, director de Carbon Group, manifiesta que “la captura de carbono en los suelos productivos es esencial para mejorar la calidad de vida de millones de personas en el mundo, desde las zonas más aisladas hasta los grandes centros urbanos. Este protocolo puede ser una plataforma para la recuperación económica de la crisis actual y para evitar la siguiente”.